Este tipo de preguntas impulsaron a las alumnas Geraldine Menna y Estefanía Carriquiri, del Profesorado de Física del Instituto de formación Docente nº16, bajo el asesoramiento del Profesor Daniel Grubich, a desarrollar una investigación que fue presentada en la Feria Regional de Ciencias y Tecnología, realizada el 26 de Agosto de 2011 en la ciudad de Las Flores, y mereció el tercer premio de su nivel.
El proyecto:
El trabajo, denominado “Formol en alisadores de cabello, y los riesgo en la salud”, pretendía determinar si los productos de uso comercial para alisado de cabello, cumplen con las normativas vigentes, en relación a los contenidos de sustancias perjudiciales para la salud.
Para ello se realizó un estudio bibliográfico preliminar en torno a la composición química y efectos fisicoquímicos de los alisadores comerciales de cabello, las características de las sustancias y los procesos involucrados, las normativas vigentes, y algunos antecedentes. Por otra parte, y este aspecto resultó el mas meritorio, se desarrolló un pequeño trabajo de campo y de análisis de muestras para detectar las sustancias perjudiciales en los productos.
El análisis químico de las muestras se desarrolló en el Laboratorio del ISFD Nº 16, por medio de la técnica de titulación de hidróxido de sodio.
¿Qué dice la ANMAT?
La ANMAT (Asociación Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica : http://www.anmat.gov.ar) aconseja a los usuarios de productos alisadores de cabello poner especial atención al momento de adquirirlos o de hacérselos aplicar en peluquerías.
Esta advertencia reside en el hecho de que se están vendiendo vía Internet y están siendo aplicados en algunos salones de belleza, productos no registrados ante la ANMAT formulados en base a formol, que pueden resultar perjudiciales para la salud, provocando cuadros alérgicos, irritación ocular y dermatitis. Los alisadores capilares convencionales se formulan en base a sales del ácido tioglicólico.
El formol permite que el cabello quede lacio, con brillo y sin sequedad. Su efecto oxidante y neutralizante, permitiría fijar la forma impuesta al cabello durante la fase reductora y restituir propiedades físico mecánicas iniciales, reformando los puentes de disulfuro entre las cadenas de queratina. Sin embargo desde los años 80', la comunidad científica recomienda limitar el uso del formaldehido, debido a sus efectos dañinos para la salud.
En el listado de la ANMAT para conservantes de uso cosmético figura el formol con una concentración permitida de hasta 0.1% para su empleo en productos para la higiene oral y al 0.2% en otros productos. En el listado de sustancias de uso con concentración limitada figura el formol con una concentración no mayor a 5 % como endurecedor de uñas.
Resultados:
La medición de porcentaje de formol , por medio de técnicas de titulación implementadas en el ISFD Nº 16, sobre los alisadores de cabello de uso comercial arrojó valores que oscilan entre el 3% y el 5% , superando en 25 veces el valor máximo permitido por la ANMAT.
Conclusiones:
Después de realizar el desarrollo experimental, con las diferentes muestras recogidas de distintas peluquerías, se concluyó que todos los alisadores utilizados habitualmente poseen formol en su composición química.
Por otra parte se pudo comprobar que TODAS las muestras analizadas sobrepasan el valor de formol permitido por la ANMAT.
Es importante resaltar que estos estudios, desarrollados con técnicas sencillas de laboratorio, en una institución escolar, por un grupo de alumnas bajo el asesoramiento de un docente comprometido con su tarea, pueden arrojar luz y colaborar para mejorar la salud y la calidad de vida de la población.
Es tarea de toda la sociedad comprometerse con estos loables objetivos.
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