Desde el próximo 1° de septiembre, los clientes de los bancos podrán realizar transferencias electrónicas inmediatas por hasta $ 20.000 sin costo. Eso resolvió ayer el Banco Central, que modificó los límites existentes. Hasta ahora, las transferencias inmediatas no tenían costo si eran de hasta $ 10.000, mientras que los bancos cobraban $ 2,50 por cada $ 10.000 adicionales. Desde el próximo mes, esa comisión quedará para las transferencias que van de $ 20.000 y $ 50.000. La medida es parte de la decisión del Central de no permitir subas en las comisiones bancarias. De acuerdo con dos entidades consultadas, no se esperaba que este límite a las comisiones genere problemas en las entidades.
El Central también aprobó ayer una norma que les permite a
los bancos disminuir ciertas exigencias de efectivo para que haya más plata en los cajeros automáticos. La medida era esperada por los bancos.
El BCRA divide el país en seis zonas de acuerdo con el nivel de bancarización: los lugares con mayor cantidad de sucursales –como Buenos Aires– son categoría 1, mientras que las zonas rurales ocupan la categoría 6. La medida del Central apunta especialmente a estas últimas. Habrá mayores estímulos para la recarga de los cajeros automáticos en las localidades que cuenten con menor oferta de máquinas y serán para cajeros “abiertos”, es decir, disponibles para todo el público y no sólo para clientes de un banco.
El Central permitirá a los bancos deducir “mínimos de efectivo” con una cuenta, que estará calculada con la diferencia entre el saldo remanente en los cajeros y el monto con el que se lo recarga. Los bancos habían pensado otra fórmula, pero la resuelta no los defraudó.