Se realizó el jueves por la noche en instalaciones del Club Argentinos una interesante conferencia sobre seguridad vial que realizó el ex piloto y periodista automovilístico, Ruben Daray.
Daray, de reconocida trayectoria también por la conducción de su programa A Todo Motor, llegó a nuestra ciudad gracias a la Municipalidad 25 de Mayo y al auspicio de Provincia Seguros. En su charla, amena y cargada de importantes reflexiones, el experimentado piloto relató sus experiencias en otros países del mundo y remarcó la
necesidad de utilizar efectivamente las medidas de seguridad disponibles en los vehículos que utilizamos a diario.
Con una muy buena convocatoria de público, el ex piloto de automovilismo disertó sobre distintos puntos relacionados a la temática vial, tales como la tecnología de los automóviles, la dinámica en los choques frontales y laterales y las medidas de prevención, entre otros.
“Lo que sucede dentro del auto”
Daray, consideró necesario para todos los vecinos, tener en cuenta todo lo que sucede adentro del auto al momento del accidente. “Lo que hay que entender es que el que va sentado en el interior, el teléfono celular o el perro que lleva atrás va a la misma velocidad que el auto”, precisó. “Cuando se produce un choque, la carrocería se detiene instantáneamente contra algo, pero uno se sigue moviendo a 40 kilómetros por hora al igual que el resto de los elementos que uno lleva, que vuelan a esa misma velocidad por el habitáculo”, graficó Daray.
A su vez, evaluó que la mayoría de los hechos se producen “dentro de la ciudad”, y puntualizó que en el país “se mueren 24 personas por día en accidentes viales. Y éstos son el del auto contra un peatón, contra un ciclista o contra un camión. Esos son los que suman”.
La problemática de las motos
Por otro lado, el conductor televisivo reconoció que a las charlas le sumó otro tema recurrente, el de las motos. Al respecto señaló: “Lo que toca un neumático de un auto contra el piso tiene más o menos el tamaño de una mano, mientras que en una moto es menor que una moneda de un peso”.
Esta característica se profundiza cuando el rodado menor gira, “el neumático se inclina y la moneda se transforma en una línea como la marca de una lapicera”.
“Los chicos andan a fondo porque quizás no imaginaron esto y están convencidos que una moto dobla y frena mejor que un auto”, manifestó Daray, quien refutó tal aspecto al indicar que “es imposible que lo haga mejor cuando la superficie que toca es menor a una moneda”.
