"Esperemos no hacer papelones", augura el primer juez argentino Ignacio Tuya, quien tendrá voz y voto en el próximo mundial de asado que se celebrará en Suecia. Y su deseo tiene cierta lógica, teniendo en cuenta que el año pasado Argentina quedó cuarta en el evento celebrado Marruecos.
Este año, habrá un condimento extra. El equipo encargado de representar al país "Fuegos de oktubre" estará comandado por Marcela Garavano;
una mujer al frente de la parrilla.
"Esperemos que nos de una gran sorpresa. Los argentinos nos jactamos mucho de hacer los mejores asados y después vemos que nos gana Liechtenstein (como sucedió en 2014). A ver si podemos reivindicar nuestra cultura por el asado. Hay que recuperar el orgullo perdido".
El asado es todo un arte. Toma su tiempo y sus gustos, como ir saboreando una copa de vino mientras se disfruta de una picada. Y el resultado dependerá del aplauso o no para el asador.
"En este caso, no valoramos el aspecto de la carne, es decir cómo se ve el corte, sino todo lo que tiene que ver con el sabor", aclara Ignacio, quien estará junto a otros 49 jueces de todo el mundo.
El mundial se llevará a cabo el 13 y 14 de junio en Gottembrugo, Suecia y contará con todo tipo de técnicas: leña, gas, artefactos modernos, antiguos, parrillas, etc. Y seis categorías: pollo, carne de vaca, de cerdo, pescado, comida vegetariana y postres.
Uno de los grandes trucos será "dominar la llama", aseguran desde World Barbecue Association. El objetivo de vendar los ojos es para maximizar los sentidos, sobre todo las papilas gustativas.