19/12/17

Queso, el aliado menos esperado para la salud del corazón


 Además de sus beneficios para la vida diaria, a hora pareciera tener algunos a largo plazo, o al menos así lo afirma un estudio llevado a cabo por investigadores de China y Holanda.
Los investigadores observaron durante diez años a 200 mil personas durante. Así lograron determinar que quienes consumían pequeñas porciones de queso todos los días poseían menos riesgo de desarrollar enfermedades coronarias e infartos que aquellas personas que no consumen el lácteo o nunca lo probaron.


"Las propiedades del queso en un principio se relacionan al alto nivel proteico de valor biológico. Son proteínas completas porque tienen todos los aminoácidos que se necesita", aseguró la licenciada en Nutrición, Agustina Murcho, en diálogo con Infobae.
El queso, como otros productos lácteos, contiene altos niveles de grasas saturadas que se relacionan con niveles altos de colesterol, arteriosclerosis y otros síntomas relacionados a las propiedades negativas del lacteo. Sin embargo, el queso también contiene beneficios potenciales, debido al calcio, y, gracias a las proteínas y la fuerte presencia del CLA, se puede relacionar al alimento con la prevención de infartos.
Las propiedades del lácteo son la clave para convertir a este alimento en un aliado al corazón (iStock)
Las propiedades del lácteo son la clave para convertir a este alimento en un aliado al corazón (iStock)
El estudio demostró que las personas que consumen grandes cantidades de queso tienen un 14% menos de riesgo de tener un infarto, mientras que aquellas personas que no consumen el lácteo tienen sólo un 10% menos.
"La principal relación que tiene el queso con lo cardíaco se debe al ácido linoleico conjugado, conocido como CLA, que además de prevenir infartos, también es beneficioso para el cáncer de colon", enfatizó la especialista. Además, explicó que la presencia de CLA en pastillas no es saludable, ya que la mejor manera de obtener este ácido es en su forma natural en el queso, que además posee tiene vitaminas, calcio, selenio y otros nutrientes.
Una de las ventajas más importantes que mencionó la nutricionista es que aquellas personas que son intolerantes a la lactosa y no pueden consumir lácteos, sí pueden ingerir algunos quesos.
"El beneficio principal de los quesos es el ácido graso monoinsaturado", agregó la profesional. "Para una alimentación saludable es importante que se encuentre este alimento, siempre respetando las cantidades. Además, las personas deben consumir quesos duros, que son los que más tienen proteínas, a pesar de ser los que más grasas presenten".










https://www.infobae.com/salud/2017/12/18/las-increibles-propiedades-del-queso-el-aliado-menos-esperado-para-la-salud-del-corazon/