Un ejemplo conocido de ello es Colombia, donde las fiestas de la temporada comienzan el 7 de diciembre con el llamado “Día de las Velitas”. Esta celebración consiste en prender velas con faroles en las entradas de las casas para “iluminar” el camino de la Virgen María.
Por esa razón, las decoraciones navideñas comienzan a encontrar lugar en semanas anteriores. En casi todo el territorio del país cafetero las calles se iluminan de cientos de luces y ornamentos alusivos a las festividades. La ciudad de Medellín es conocida por llevar a cabo el Festival de Luces, un espectáculo que comienza en el mes de noviembre y llega hasta después de la fiesta de los Reyes Magos.
En muchos países de Latinoamérica las festividades comienzan 9 días antes de la llegada de la Navidad, donde se celebran las Novenas de aguinaldo, razón que los lleva a tener preparadas las decoraciones de antemano. En México, a partir del 16 de diciembre se recuerda el peregrinaje de José y María, en busca de un lugar para que naciera El Niño Jesús y los villancicos también forman parte de la tradición de muchos lugares durante estos días.
En el caso de Brasil, el encendido del Árbol de Navidad en las grandes ciudades es todo un acontecimiento. Desde hace varios años, en Río de Janeiro se levanta el impresionante “árvore de natal da lagoa” un árbol de Navidad de aproximadamente 85 metros de altura ubicado en la Laguna Rodrigo de Freitas, el cual es iluminado por cientos de luces y marca el inicio de las fiestas a mediados del mes.
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