Las personas nacidas bajo el 7 son soñadoras. Se sienten atraídos por los aspectos místicos y religiosos de la vida y gozan de facultades psíquicas.
“Si hay una característica que maneja este número es el mundo de la mente y el pensamiento Poseen una gran velocidad mental y les resulta fácil dedicarse al estudio de lo que les interesa. Son desapegados de la materia. están relacionados con lo superior dejando muchas veces de lado aspectos terrenales”.
Buscan el aislamiento y la naturaleza para poder encontrarse a sí mismos.No se conforman con dogmas y estructuras preestablecidas,más bien suelen elaborar su propio sistema de creencias.
“Pitágoras consideraba el número 7 como el más sagrado de toda la escala matemática. Las personas regidas por esta frecuencia no se dejan engañar por la superficie de las personalidades, sino que más bien buscan calar en el interior de quien tienen adelante”, explica la especialista. De carácter reservado, viven utilizando su imaginación e intuición para construir proyectos.
En su aspecto negativo, suelen confundir la realidad bajo pensamientos ilusorios. Pueden perderse fácilmente en sus caminos mentales sin entender cómo o hacia donde seguir. Es necesario que se tomen el tiempo para observar y atravesar la confusión.
Además, “la ansiedad es moneda corriente y la mente se les suele descarriar, poniéndose incoherentes y confusos. El ego los puede cegar y la soberbia les aleja de la verdad”.
A nivel profesional, suelen ser muy respetados dado su nivel de conocimiento. “Van a fondo con su saber buscando la excelencia en cualquier actividad que desarrollen: sean científicos, cirujanos, maestros, filósofos, ocultistas o arquitectos. Su mente profunda y creativa los lleva a puestos de gran reconocimiento”.