.Desde la Asociación Civil “La Técnica del Futuro” no podemos dejar de expresar nuestro sincero repudio frente a los actos de vandalismo contra nuestra querida Escuela de Educación Técnica. Aún estamos buscando algún sentido mientras atravesamos el desconcierto que provoca el ataque a una institución pública que, con recursos muy limitados, tiene una tarea tan ardua y noble como la de educar a nuestros jóvenes.
Por otro lado, más allá del dolor generado, estos daños materiales deberían hacernos reflexionar sobre qué papel le estamos dando a la Educación en nuestra sociedad. ¿Es un papel realmente protagónico o muy secundario, casi decorativo? Vivimos en tiempos donde la educación, la formación continua y el desarrollo del capital humano son cada vez más necesarios para que una sociedad prospere. Esto siempre fue así, pero ahora los cambios son demasiado rápidos y ni los más capacitados parecen contar con todas las herramientas para reaccionar a tiempo, entender los tiempos que corren y avanzar con relativa seguridad hacia una mejor calidad de vida.
Somos una sociedad distraída. El día a día nos consume entre tantas obligaciones y estímulos, muchas veces demasiado superfluos. Lamentablemente tienen que ocurrir situaciones tan feas como la de estos días en la Escuela Técnica para detenernos unos minutos a recapacitar un poco (Y muchas veces, ni eso…)
odemos creer que lo que pasó es un hecho aislado, una muy mala idea, o una pésima travesura de unos pocos. O podemos considerar la posibilidad de que no ha sido nada de eso, sino una pequeña demostración de que estamos haciendo verdaderamente muy poco y nada por la educación de nuestros chicos.
Debemos reflexionar sobre a qué le damos importancia como individuos y como sociedad. Cuáles son los valores que vivimos e inculcamos en casa, cómo acompañamos la formación meramente académica con gestos y acciones que van mas allá de “lo técnico”. Es un momento para pausar las distracciones y recapacitar sobre qué estamos haciendo por nuestra educación y la de nuestros hijos. Qué reclamamos a nuestros gobernantes, qué hacemos cuando estamos en familia, a qué le dedicamos tiempo en el ya poco tiempo libre que tenemos.
Es realmente necesario detenernos unos minutos a pensar qué clase de sociedad pretendemos y cómo podemos sumar nuestro granito de arena para estar cada día un poquito más cerca, un poquito mejor… No olvidemos que la educación nace en la familia, crece en la escuela y madura en la sociedad.
Un saludo muy cordial,
Asociación Civil “La Técnica del Futuro”.
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